Regresamos al colegio... intenté ignorarla, intenté concentrarme en mi relación con Melanie, nada funcionó, prontamente me rendí y comencé a mandarle mensajes anónimos, si ella se enteraba que era yo jamas me volvería a contestar, y así paso.
Ese ultimo día de ensayo ya no aguante, tuve que ir tras ella cuando se fue de la casa de Greys, la alcancé en nuestro parque, pasó lo que no esperaba, me dijo 'te amo', eso me hizo sentir bien, mejor de lo que había estado en meses.
Y ahora esa felicidad se termina, se termina al verla descansando en esa cama, tan pálida, tan herida, dejando que su vida dependiera de aparatos.
Acaricié su mano.
- Si pudiera regresar el tiempo lo haría, volvería hasta ese día en que tome, me negaría a ir con Greys a esa fiesta, todo lo malo partió de ahí.
Solo quería que me contestara, solo eso...
- Joven, este no es horario de visitas -dijo una enfermera cuando me vio-, son las cuatro y media de la madrugada.
- No quiero separarme de ella... por favor.
- Son políticas del hospital...
- Por favor -repetí-, es a quien más amo, no quiero perderla.
La enfermera me miro triste.
- De acuerdo... pero...
- Usted no me vio -dije agradecido.
Ella asintió y reviso que los aparatos funcionaran a la perfección, luego se fue.
- Logan -dijo alguien despertándome.
- Liam -dije tallandome los ojos.
- Creí que te habías ido... necesitas descansar.
- No Liam, no me voy hasta saber que esta fuera de peligro.
El asintió.
- Deberías comer algo por lo menos.
Yo solo mire a Amy, seguía en la misma posición que cuando entre.
- Yo la cuido -susurró el.
Lo mire y asentí.
Aun no había mejoras en Amy, seguía en coma, Liam me había convencido para asistir al funeral de Nick, fue mi amigo, es lo menos que puedo hacer, Greys iba conmigo, lloraba sin consuelo.
- Gracias por todo amigo -dije arrodillándome en su tumba.
Era tarde... tarde para decirle gracias, para decirle cuanto lo aprecie, para cambiar las cosas... Él ya no estaba.
Cinco días han pasado, cinco días de desesperación, cinco días de sufrimiento, cinco días sin mejoras de estado. No había asistido a la escuela, no regresaría sin Amy, mi madre siempre me llamaba, Liam me insistía a que descansara, Greys me había dicho que nuestra presentación la habían suspendido debido al accidente, solo quedaba Melanie, me había llamado repetidas veces reclamándome el porque estaba con Amy y no con ella, ¿podía ser tan egoísta?
- Necesitamos hablar -le dije mientras ella se miraba al espejo.
- ¿Sobre que? -me sonrió a través de este.
- Ya no puedo seguir contigo -dije sin rodeos.
Su sonrisa se desvaneció y me miro sorprendida.
- ¿Que estas diciendo? -se volteo furiosa.
- Ya no quiero estar contigo Melanie.
- ¿Me dejas por esa que ni siquiera puede mover un dedo?
- Te prohíbo que hables así de ella -dije furioso-, es de quien estoy enamorado.
- Morirá -dijo segura.
- No mientras yo este con ella -dije eso y no esperé a que me contestara.
Salí de su casa con rumbo al hospital.
No se como pude soportar tanto de una chica tan fría, egoísta y sin corazón... ¿como podía ser así?
Me mire en el espejo del baño, mi aspecto no era bueno, había adelgazado debido a que no comía, mi rostro parecía demacrado y cansado, casi no dormía por verla, aquella enfermera me cubría para estar las noches a lado de Amy. Yo tenia aspecto de ser otro paciente más de ese hospital, no me importaba, lo que me importaba era que mi Amy se recuperara.
Salí del baño y me dirigí hacia mi acostumbrado lugar, Liam estaba ahí, Greys lo acompañaba.
- Liam...
- Aun nada -contesto sin dejarme terminar.
Me senté en el suelo y apoye mi cabeza entre mis piernas, el cansancio era insoportable, pero no me movería hasta verla bien.
Era lo único que quería ¿era mucho pedir? volver a mirarla sonreír, perderme en esos ojos que la hacían tan única, solo quería verla feliz otra vez.
