domingo, 31 de agosto de 2014

Epilogo


El cielo estaba cubierto de nubes grisáceas, justo como me gustaban.
El invierno estaba presente, había niños corriendo por las calles llenas de nieve, sonreí al pensar lo increíble que seria estar ahí.
Suspire y acomode mi bufanda, me recargue nuevamente en el barandal.
Aquellos pequeños corrían sin preocupaciones, ¿que puede preocuparte a los seis años? solo preocupada el salirse de la raya cuando pintabas un dibujo en la escuela.
Deseaba poder salir y correr junto a ellos, pero seguramente me mirarían un tanto extrañados, los entendería... mi reacción seria, ¿que hace una señora de 50 años corriendo en la nieve?
Bueno, tal vez exagere, solo habían pasado siete años desde que había salido de aquel abrumante colegio, sonreí mirando a un hombre quien jugaba con un pequeño de 2 años. Deseaba salir y correr como todos ahí. Suspire y me aleje del balcón, camine por toda la habitación hasta decidirme, tome las maletas que estaban sobre la cama y sin pensarlo dos veces las baje hasta la primera planta, las deje cerca de la puerta y mire el reloj que estaba cerca de la chimenea, faltaban dos horas para que el vuelo a Los Ángeles saliera, había prometido a Mikeila que estaría allá antes de que llegara la navidad, coloque mi mano en el picaporte pero este giro y no fue por causa mía, la puerta se abrió.
- ¿Amy que estas haciendo acá?
- Es mi casa -sonreí.
El rió.
- Me refiero aquí abajo -dijo sonriente, su sonrisa se desvaneció al ver las maletas-, Amy -dijo serio.
- ¿Si? -dije inocente.
- ¿Que hacen esas maletas acá?
- Supongo que Mikeila...
- No deberías haberlas bajado -dijo frunciendo el ceño.
- Lo siento -dije acercándome a él y besándolo dulcemente.
- ¿Crees que con eso lo arreglas? -enarco una ceja.
- Eso esperaba -sonreí.
El sonrió y me beso nuevamente.
Sentí unos débiles tirones en mi abrigo, baje la mirada topandome con ese pequeño.
- ¿Ya nos vamos? -pregunto con una vocesita alegre.
- Si amor -conteste sonriendole.
El pequeño se saco el gorro de lana que llevaba puesto haciendo que pequeños copos de nieve cayeran al piso de madera.
- ¡Hey, Benjamin! -lo regaño su padre.
El niño sonrió dejando ver ese brillo en sus ojos verdes, su cabello castaño estaba despeinado debido al gorro.
- No lo regañes -defendí al pequeño.
- No lo consientas Amy -sonrió el.
Sonreí besándolo nuevamente.
- Vamonos mamá -protesto el niño pequeño.
- Solo ponte el gorro antes de que a papá le de un ataque de histeria -le sonreí al pequeño.
El asintió e intento ponerse el gorro, su intento fue fallido.
El niño dejo caer el gorro en forma de berrinche.
Yo reí.
- Haber campeón -Logan se puso en cuclillas y le puso el gorro de vuelta.
- Gracias papá -dijo el niño abrazándolo.
Decidimos partir, Logan llevo las maletas al taxi que ya esperaba afuera, para después regresar por Ben, mi pequeño Ben, había nacido un 17 de enero, como mi mejor amigo, Logan y yo habíamos prometido que a nuestro primer pequeño le llamaríamos Ben, fue una sensación de alegría cuando nació mi pequeño, Ben tenia dos años, había heredado el pelo de su padre y su atractivo físico, yo estaba feliz, Ben solo había heredado mis ojos.
El vuelo de ocho horas pasaron rápido, en cuanto menos lo esperamos ya estábamos frente a esa casa, ahora pintada de un tono azul.
Toque el timbre y en menos de un minuto la puerta se abrió.
- ¡Amy! -gritaron mi nombre con alegría mientras sentía un abrazo un tanto exagerado.
- Tranquila Greys, me asfixias -reí.
- Lo siento, es que... Ha pasado un largo tiempo -dijo sonriente.
- Yo también te extrañe Greys -dijo Logan en voz alta.
Ella rió y abrazo a su mejor amigo.
- ¡Oh Dios! -dijo Greys mirando a mi pequeño-, ¿y este apuesto pequeñín?
- Soy Ben -dijo el escondiéndose tras su padre.
- Soy la tía Greys -dijo ella extendiéndole su mano.
Ben la tomo un tanto apenado.
Entramos a la casa, hacia ya tres años que no estaba aquí.
- ¡Hermana!
Liam se levanto al mirarme dejando a una niña en el sillón, lo abrace, hacia tanto que no lo veía y lo extrañaba de verdad.
- Tu debes de ser Ben -dijo mi hermano mirando a mi hijo.
Ben asintió tímidamente.
- Mikeila esta en la cocina -dijo Greys arrastrándome hacia allá.
- ¡Oh Amy! -dijo mi madre en cuanto me vio.
La abracé dulcemente.
- ¿Como has estado? -pregunto sonriente.
- De maravilla -sonreí.
- Me imagino -sonrió ella-, ¿donde esta...?
- Hola familia -fue interrumpida por Logan, quien entraba con Ben en brazos.
- Que nene mas apuesto -dijo Mikeila acercándose a Ben.
- Es idéntico a Logan -dijo Greys sonriente.
- Pero tiene los hermosos ojos de Amy -sonrió Logan mirándome.
- Mamá...
Una pequeña niña llego corriendo hasta los brazos de Greys.
- ¿Que pasa?
- Papá me quiere hacer cosquillas -rió la pequeña.
Era una copia de Greys, a pesar de tener los ojos misteriosos de Liam era encantadora.
- Oh, no... de esta no te escapas -dijo Liam entrando a la cocina.
Liam estuvo apunto de tomar a la pequeña en brazos cuando Ben se interpuso en su camino.
- No -dijo apuntándolo con su dedo con el ceño fruncido.
Liam paro en seco mirando al pequeño.
- ¿Y tu? -dijo fingiendo enojo.
- Si mi primita no quiere, no -dijo el pequeño sin dejar de apuntar con su dedito.
Liam asintió.
- Ganas la batalla por esta vez -le dijo a mi pequeño hijo.
Ben sonrió victorioso y abrazo a la pequeña Andy.
Greys, Logan, Mikeila y yo estallamos en carcajadas, era tan tierno y gracioso haber presenciado esa escena.

La cena había estado excelente ahora los niños se encontraban dormidos, entre risas y risas comencé a sentir un dolor agudo.
- Logan -dije asustada.
- ¿Que pasa? -me miro el alarmado.
Me lleve la mano a mi abultado vientre.
- ¿Nacerá? -dijo él con los ojos muy abiertos.
Asentí tratando de calmarme.
- Amy -gritó él, se levanto del sillón y comenzó a caminar en círculos-, Liam... ¿como? ¿donde? ¿y tu?
- Tranquilo -dijo mi hermano riendo-, solo vallamos al hospital.
- ¿Que hospital trabaja en estas fechas? -dijo Logan exaltado.
- Tranquilo -ahora fue Greys quien intervino-, hay uno cerca.
- ¡Ah! -grite.
Logan corrió hacia mi.
- ¿Estas bien?
- Solo una contracción Logan -trate de sonreír.
- Liam -gritó él.
No tardamos en actuar y llegar a ese hospital. La atención fue rápida, me llevaron a la sala de partos en una camilla con Logan a mi lado, era cómico verlo tan preocupado y ansioso.
- Tranquilo amor -sonreí mirándolo.
El asintió aunque no se relajo ni un poco.

Un dolor insoportable que ya había sentido antes, Logan estaba tenso sosteniendo mi mano, miraba pálido a la doctora que estaba frente a nosotros.
- Solo un poco mas -me animo esta.
Di todo mi esfuerzo y quede agotada, escuche un leve lloriqueo que se hizo intenso, un precioso llanto de bebe, trate de mirar pero la doctora me lo impedía, estaba de espaldas haciéndole no se que a mi bebe.
Logan apretó levemente mi mano. Lo mire, el estaba sonriéndome, sus ojos desataban un brillo peculiar.
- Felicitaciones, es una niña -dijo la doctora entregándome a mi bebe.
- La mire por unos segundos.
- Es hermosa -sonreí con lagrimas en los ojos.
- Igual que tu -sonrió el.
- Mamá... -un pequeño grito se escucho en el pasillo para después verse abrir la puerta, Ben corría y se lanzo a los brazos de Logan.
Un hombre venia tras el, la doctora lo calmo diciendo que todo estaba en orden, el hombre se retiro.
- ¿Que haces aquí campeón?
- Tío Liam me trajo, corrí porque quería verlos y ese hombre me siguió -dijo con el ceño fruncido-, yo solo quería ver a...
Ben guardo silencio en cuanto vio a la bebe que tenia en brazos.
- Ella... -susurro con su vocesita.
- Ella es tu hermanita -sonrió Logan acercándolo a ella.
Ben sonrió ampliamente y toco su carita.
- Es bonita, como mamá -sonrió el pequeño.
La pequeña bebe movió sus diminutas manitas intentando tallar sus ojos, después de unos segundos los abrió, unos preciosos ojos marrones estaban protegidos por una largas pestañas.
- Tiene tus ojos -susurre mirando a la pequeña.
- Si -dijo Logan con la voz quebrada.
¿Que podía ser mejor? Tenia una hermosa familia, amaba a mi esposo, seguía tan enamorada de el como desde el primer día, mi precioso hijo Ben había sido nuestro primer fruto de amor, ahora mi familia estaba completa al tener a esa preciosa pequeña en mis brazos.
- Hola Scarlett
La pequeña me miro seria.
Logan sonrió mirando a mi pequeña bebe.
- Yo te voy a cuidar -canturreo mi niño.
Por fin tenia mi familia perfecta
¿Que mas podía pedir?

I Will Be - Capitulo 110


- Todo estará bien -escuche entre sueños.
No tuve la fuerza para abrir los ojos y ver quien me susurraba.
- Tu no tienes culpa de nada, fue un accidente.
'Yo lo provoque' pensé.
- En realidad fue culpa mía, la ira me cegó.
'¿Ben?'
- Solo quiero que dejes de culparte, fue algo que solo tenia que pasar.
'No es justo que te pasara eso'
- Así tienen que ser las cosas Amy, hay que acostumbrarnos.
'No me acostumbrare sin ti'
- Yo solo fui un amigo en tu vida, solo eso, tu al que en verdad amas es a Logan.
No pensé en nada... ¿que iba a contestar?
- No te sientas mal, los tres sabemos que es así, y yo como buen amigo de ambos solo deseo su felicidad.
'No podría Ben'
- Tienes que seguir tu vida, tienes que estar con la persona a quien en verdad amas.
'Pero...'
- Solo ve con él, se feliz.
'No puedo'
- Sigue con tu vida, se feliz con el, recuerdame solo como el amigo que estuvo contigo y solo quiso tu felicidad, que solo te ayudo a salir adelante y solo eso.
'Siempre te recordare Ben, siempre'
No hubo mas respuesta.
Abrí los ojos y me levante apresurada de la cama
- ¿Ben? -busque por toda partes esperando encontrarlo, nada.
Me senté en el suelo y me recargué en la cama.
¿Rabia soñado? ¿Había sido real? No podía haber sido real? No podía haberlo sido, aunque se sintió real, no podía serlo, Ben no estaba conmigo, no tenia... vida. Quizá fue solo un sueño, no se que debería hacer,ya no sentía culpa, solo me sentía mal porque el ya no estuviera conmigo, para ser ese amigo que siempre estuvo a mi lado apoyándome.
¿Que debía haber? No lo se.


Seis meses después


- ¡Loco! -reí-, ella solo tiene 17
- Y yo solo tengo 19
- Son jóvenes -dije mordiendo mi tostada.
- No me casare mañana Amy.
- Bueno, pero aun así... ¿estas seguro?
- Mas que nunca -sonrió el.
- ¿Y cuando lo harás? ¿Ya le dijiste a mamá?
- Aun no lo se y aun no.
- Estas tan preparado -me burle.
- Tranquila Amy -rió el-. Es un paso importante en mi vida.
- Lo se hermano -sonreí.
- Quiero hacerlo bien, quiero que ella sea feliz.
- Y seguro que lo estará, ella te quiere mucho.
- Pero no mas de lo que yo la quiero a ella -sonrió ampliamente.
Cuando Liam hablaba de Greys sus ojos se iluminaban, el estaba tan enamorado que quería comprometerse con ella, se que Liam es lo bastante maduro y esta consiente de lo que eso significara, claramente se que el esperara un tiempo a que ambos estén preparados. Mi mamá, como ya le decía, se que lo apoyaría pues ella quería mucho a Greys y la chica también, tener a Greys de cuñada no seria mala idea. Liam quería hacer lo mejor para que ese momento fuera inolvidable y se que lo lograría,.
A mi madre se le veía animada, hace tres meses que estamos remodelando la casa, claro que las cosas de mi papá nadie las toca, son parte de la decoración. Mikeila era diseñadora, se había retirado por un tiempo,pero ahora esta de vuelta.
Mi conciencia ya estaba tranquila, hasta cierto punto, cada catorce de todos los meses, Logan me acompañaba a ver a Ben, estábamos con el y le contábamos lo que sucedía, solíamos hablar por horas, es como si el nos escuchara y de alguna otra forma nos contestara. 
Melanie ya no nos molestaba, a pesar de que Logan y yo no estábamos juntos, en cualquier otra circunstancia estaría detrás de el, ahora esa chica tenia novio, parecía una relación estable, llevaban cerca de siete meses, desde que estuve en el hospital. 
Greys había vuelto a hablar con Logan, eran mejores amigos de nuevo, eso era algo que agradecía de algún modo, Greys se la vivía en mi casa, claro solo cuando Liam estaba ahí, creo que el compromiso entre ambos seria algo lindo.
Por lo que supe, los padres de Ben intentaban llevar su vida normal, los vi en un par de ocasiones en las cuales la culpa volvía, pero al instante, algo en mi me relajaba, me decía que no era culpa mía, no se como podía estar tranquila.
Logan... yo seguía tan enamorada de el como el primer día, ahora era un tanto complicado pues solo eramos amigos, hablábamos por horas, salíamos juntos y quizá un beso en la mejilla, pero nada mas de eso, admito que extraño todo lo que viví con el, pero al menos nos frecuentamos.


- No es algo fácil Amy -dijo Logan mientras lanzaba un pedazo de pan al lago.
Los patos nadaron hacia el y lo comieron.
- Pero es lo que tu quieres -dije mirándolo.
Estábamos sentado en el pasto frente a ese tranquilo lago.
- No estoy seguro de poder hacerlo -el miro el pedazo de pan que tenia en las manos y comenzó a desmoronarlo.
- Si puedes Logan, tu voz es grandiosa, aprovecha la oportunidad que te están dando.
- No lo se Amy.
- No dudes -coloqué mi mano sobre la suya-, solo aprovecha.
- Es que...
- Nada de peros Logan, es tu sueño... cumplelo -sonreí.
El sonrió y asintió.
- Tienes razón.
Tomo otro pedazo de pan y lo tiro al lago.
Nos quedamos en silencio.  
[http://www.youtube.com/watch?v=bYtiZh0ObeI&feature=related ]
- ¿Amy? -rompió el silencio.
- Dime -lo mire.
- ¿Recuerdas cuando cante para ti?
Sentí el sonrojo en mi.
- Si...
- ¿Y que opinas?
- Ya lo dije -sonreí-, que tu voz es excelente y tienes un gran talento, debes aprovechar la oportunidad que te dan.
El sonrió.
- Gracias, pero... no me refería a eso -me miro.
- ¿Entonces? -lo mire extrañada.
- Me refería a... -se callo.
- ¿A...? -lo anime a continuar.
- ¿Recuerdas lo que decía la letra?
Mi estomago sintió miles de sentimientos ¡Por supuesto que lo recordaba!
- Si -sonreí.
- Bueno... -el lanzo las ultimas migajas de pan que tenia en su mano, se dio la vuelta quedando frente a mi-. Yo quiero que... -me miro a los ojos, esa mirada que me mataba-, que la amistad que tenemos dure siempre, seamos lo que seamos, sabes que eres una de las personas mas importantes para mi -sonrió, acaricio mi mejilla y después se torno serio-, me odio por haberte hecho daño, por haber dejado que te alejaras de mi, me odio por haberte perdido... -tomo mis manos-, Amy, nunca debí dejarte ir, nunca debí hacer lo que hice... debí haber permanecido contigo, porque yo pertenezco contigo, te pertenezco a ti...
- Logan...
El coloco su dedo en mis labios haciéndome callar.
- Te extraño... te extraño como nunca, se que nos vemos y salimos, pero no es como yo quisiera. Yo quisiera compartir mi vida contigo, compartirla hasta que el aire se nos termine, hasta que el corazón de el ultimo de sus latidos, quiero estar contigo por el resto de mi vida, llevar una vida feliz contigo, sinceramente no me veo con nadie mas que no seas tu... quiero que ese lugar a mi lado lo ocupes tu... Lo siento, es lo que puedo decir, te hice daño, me fui cuando me necesitabas, debía esforzarme mas por volver a estar a tu lado. Perdón.
Logan bajo la mirada. Tome sus manos haciendo que el me mirara.
-  No tengo nada que perdonarte, fue una equivocación lo que paso, eres humano, los humanos cometemos errores y es mejor aceptarlos... yo quiero estar siempre contigo, quiero vivir a tu lado y jamas dejarte ir, eres todo lo que tengo, todo lo que quiero, no se que haría sin ti, no podría vivir un día mas sin ti, eres lo que mas necesito, seré todo lo que quieras que sea, me quedare a tu lado siempre...
Logan sonrió y se acerco a mi.
- ¿En verdad?
- Estoy segura... quiero estar contigo siempre.
Logan se acerco mas a mi, tomo mi mano y me coloco algo.
Lo mire, el pequeño objeto plateado me hizo sonreír.
- Me lo entregaron cuando... paso eso. Quiero regresartelo, es tuyo.
Me puse el anillo y mire a Logan.
- Te amo -susurre.
El tomo mi rostro entre sus manos, me acerco a el.
Aquellos sentimientos volvieron, salieron de mi como aquella primera vez, como ese primer contacto, como esa primera mirada.
Sus labios acariciaron los míos.
- Te amo -susurro el.
En seguida, sus labios apresaron los míos, se movían al compás, estaban hechos para estar juntos. Era tal y como lo recordaba, el y yo, solos en ese lugar, donde desde el primer contacto el mundo desaparecía dejándonos solo a nosotros. En esos momentos olvidaba quien era, olvidaba mi vida, mis penas, olvidaba a todos los que habitaban en la tierra, sus besos eran algo que me hacia estremecer, algo que no se igualaba en el mundo, una sensación que nunca había experimentado.
El amor, algo que creía inexistente ahora vivía en mi, sabia lo que se sentía poder darlo y recibirlo, con el a mi lado dejo de estar encerrada en mi misma, ahora puedo disfrutar de la vida, ahora puedo dar amor sin miedo, puedo confiar en mi misma y en los demás, ahora se que los amigos en verdad existen y están contigo hasta el final, ahora puedo expresar todo lo que siento... ahora, solo seré quien quiero ser.

viernes, 15 de agosto de 2014

I'll miss You - Capitulo 109


Desperté, estaba en esa habitación blanca, los recuerdos volvieron a mi, comencé a derramar lagrimas.
Ben había muerto por culpa mía, pero si no me hubiera lanzado sobre el, quizá ahora Logan lo estuviera, prefería estar muerta yo a que uno de ellos dos, ninguno lo merecía. 
La luz se apago,  ya era de noche, me recargue en la almohada...
Según Logan,llevaba cerca de quince días aquí, quince días desde que Ben murió y yo no estuve con él...
La puerta se abrió de repente y la luz se encendió, era el.
- ¿Como estas? -me pregunto en cuanto me vio despierta.
Solo negué con la cabeza.
- Amy -se acerco a mi-, no es tu culpa...
- Yo se que lo es -dije agachando la cabeza.
- El no pensaría lo mismo -dijo mirándome-, el te diría, así tuvieron que pasar las cosas, hay una razón. Es lo que diría el, jamas te culparía de nada.
- No estoy segura de eso...
- Yo si, lo conocí desde que eramos niños, se lo que diría...
- Pero...
- Tu no tienes culpa de nada -beso mi frente.

Una semana mas, solo estuve una semana en ese hospital, hoy por fin saldría de ese encierro de paredes blancas.
- ¿Lista? -pregunto mi hermano sonriente.
- Es lo que he esperado desde que desperté -reí.
Caminamos hacia la salida del hospital, salimos de el, la temperatura cambio de pronto, en el hospital había un aire fresco, y afuera comenzó el calor.
Tomamos un taxi y llegamos a casa... ese lugar que extrañaba.
Liam me llevo hasta mi habitación.
- Bienvenida hermanita -dijo abrazándome.
- Gracias por todo Liam... por estar siempre conmigo, por no dejarme sola.
- Eres mi hermana, siempre estaré contigo.
- Gracias Liam -susurré-, te adoro.
- Y yo a ti -me beso la cabeza.
Liam salio de mi habitación, yo la mire, seguía como la había dejado, me senté en la cama y mire el cajón de la mesa de noche abierto, tome mi celular y lo encendí.
Entre a mis fotos, ahí había muchas, de Greys, de Liam, de mi padre... tenia una donde estaba con Ben. 
Mis lagrimas salieron.
- Aunque Logan diga todo eso... se que es mi culpa...
Me culpo... y lo seguiré haciendo hasta siempre.
Busque el numero de Logan y marque.
Solo sonó una vez
- ¿Amy?
- Hola Logan.
- Hola... ¿paso algo?
- Logan... quiero que me acompañes a un lugar.
- Seguro... ¿a donde?
- Quiero ver a Ben -susurré.
El se quedo callado por unos segundos.
- ¿Cuando?
- Ahora -susurre.
- Salgo para allá.
Corte la llamada.
Decidí tomar una ducha, me sentía cansada, pero quería disculparme con el.
No tenia ganas de nada, así que tome lo que fuese de mi closet, deje mi cabello suelto, en ese preciso momento sonó el timbre, baje y Liam ya estaba ahí. Platicaba con la persona que había tocado el timbre.
Termine de bajar las escaleras y Liam me miro debido a que me había escuchado. Sonrió.
Me acerque a la puerta y ahí estaba Logan.

- Es por acá -dijo Logan tomándome de la mano.
Caminábamos entre una hilera de lapidas. El cementerio estaba solitario, solo eramos Logan y yo caminando entre esas tumbas.
- Aquí -susurro el soltándome.
Mire aquella lapida.
'Benjamin Marsden Jens 1996-2014' decía su inscripción.
Llorar, eso era lo que quería, deje que las lagrimas salieran, me arrodille a lado de la tumba.
- Ben -susurre tocando su leyenda-, tu no deberías estar aquí... este no es tu lugar, no perteneces aquí... yo debería estar en tu lugar.
Logan se arrodillo a un lado de mi y coloco su mano sobre mi hombro.
- Ninguno merece estar en ese lugar -susurro el.
- Yo si -susurre.
- De ninguna manera Amy...
Suspire y mire esa lapida gris.
Si tuviera otra oportunidad, volvería atrás, arreglaría lo ocurrido y entonces Ben estaría conmigo.
Estuvimos veinte minutos mas, la mayoría del tiempo en silencio, no había nada que decir.