¿Que sentí? Era una excelente pregunta,ese beso había sido algo que esperaba desde que decidí aquello, pero no se si lo que sentí era lo que esperaba... nervios, si sentí, pero no se si algo mas allá de eso. El había sido tan delicado, sus labios rozaban los míos, como si tuviera temor a romperlos, estoy de acuerdo que era un gesto que me encantaba pero aun así era demasiado extraño besarlo. Debía acostumbrarme, ahora estábamos juntos.
- ¿Deseas algo, querida? -pregunto Elvia.
- Estoy bien, gracias -sonreí de vuelta.
- Bueno, si necesitas algo, no dudes en llamarme -se dio la vuelta regresando por donde había venido.
Suspire y mire aquel instrumento que nos había unido.
Esperaba no arrepentirme, esperaba aprender a quererlo y no lastimarlo, esperaba no hacerlo pasar por lo que yo había pasado.
Me recargue en el sillón mirando la puerta de entrada, a través de las ventanas se colaban los últimos rayos del sol, pues la noche estaba cayendo.
- Amy -Ben me llamo desde la puerta.
Me levante del sillón para ir a su encuentro, llegue con el y me sonrió.
- ¿Te llevo a casa? -enarco una ceja mientras me tocaba la mejilla.
- Si -sonreí colocando mi mano sobre la suya.
El deslizo su manos hasta mi nuca y me acerco a el besandome la frente.
- Vamos entonces -dijo sonriendo.
Caminamos hasta la entrada principal, salimos de la casa caminando hasta su coche, hicimos la ya acostumbrada rutina, sin dejar de lado su 'Amy, el cinturón', emprendimos la marcha.
Los diez minutos pasaron rápido, el camino se realizo en silencio, el estaba concentrado en el camino y yo miraba por la ventana, llegamos a mi casa, Ben tuvo que irse rápido ya que le quedaban solo unos minutos para irse con sus padres.
Camine hasta la puerta de entrada y toque el timbre, había olvidado mis llaves. Después de dos minutos la puerta se abrió, Greys y Liam se encontraban del otro lado, ellos me sonrieron.
- ¿Como te fue? -pregunto Greys al instante.
Me encogí de hombros recordando aquello.
- Creo que... somos novios
- ¿Que? -preguntaron al unisono.
- Creí que no podrías -dijo Liam mirando a Greys, quien lo miraba de la misma forma.
- ¿Y donde esta el? -pregunto Greys mirando por detrás de mi-, creí que vendría contigo.
- Tuvo que regresarse pronto, iba a salir con sus padres -trate de sonreír.
- Bueno -Liam me miro-, tendré que hablar luego con el.
Después de todo lo que había pasado, Liam se había vuelto mas sobreprotector que nunca.
- Amy, iré a dejar a Greys -dijo mientras rodeaba su cintura-, vuelvo en un rato.
- Cuídate mucho Liam -suplique.
- Esta bien, tranquila -sonrió.
Salieron de la casa encaminándose por la calle, entre a la casa y subí directamente a mi habitación, sin hacer nada mas, me tire sobre la cama.
Me sentía rara, no había deseado aquel beso, Ben era como mi hermano, pero ya no había marcha atrás, todo estaba dicho y hecho.
Suspire abrazándome a la almohada, sentí deseos de llorar y así lo hice, creí que todo lo haba hecho mal, tal vez me había equivocado... esto me lo había dicho Greys, "No te arrepientas Amy". Lo estaba haciendo, ya no lo haría mas, me había prometido no hacerlo y lo cumpliría.
- Papá -susurre llorando aun mas.
Lo extrañaba, lo necesitaba, tenia miedo de fallarle... había maldecido la hora en la que le había dicho "Si quiero irme contigo", pensaba en sobre lo que hubiera pasado si me hubiera quedado en mi infierno, tal vez todo abría sido igual... o peor, quizá vería a mi padre pocas veces, pero lo vería, tal vez mi madre me estaría hiriendo cada vez mas, en la escuela, seguiría sola, la típica niña sin amigos, sin nadie. Lo mas importante... el estaría vivo.
Claro esta, hubiera sufrido mas, si me hubiese quedado jamas habría conocido a mi hermano, a Greys, a Ben, jamas habría sabido lo que era amar, jamas habría experimentado lo que era el amor, el dolor, esa sensación de vivir, jamas me habría enamorado a tal punto de doler. Jamas habría conocido a Logan.
