- Vamos a mi casa -propuso Ben.
- ¿A tu casa? -lo mire confundida.
- Te invito a comer.
- No, no se Ben...
- Me vas a despreciar -me miro por un segundo.
- Por supuesto que no...
- Entonces no se diga mas -sonrió sin dejarme terminar.
Suspire resignada, en auto, su casa quedaba a diez minutos de donde estábamos, no quería ir, pero tampoco quería despreciarlo como el había dicho. Chantajista.
Llegamos a su "casa", Ben aparco el auto cerca de otros mas, seguramente de sus padres. Como ya se le había hecho costumbre, Ben bajó del auto y me abrió la puerta, caminamos por su enorme jardín para llegar a la entrada, había una chica rubia arreglando el jardín quien en cuanto vio a Ben lo saludó sonriente. Seguimos nuestro camino hasta llegar a la puerta, al entrar una mujer bajita recibió a Ben sonriente.
- Joven Marsden.
- Hola Elvia, ¿y mis padres?
- Salieron, joven.
- ¿Y regresan hoy?
- Si joven, llegan mas noche.
- De acuerdo -sonrió-, ¿pueden preparar algo de cenar?
- En seguida joven -ella se dio la vuelta comenzando a caminar cuando Ben la detuvo.
- Elvia -se volvió en seguida-, Amy es vegetariana... preparen algo de su agrado -sonrió Ben.
- Por supuesto joven -sonrió la señora y me miro-, con permiso.
- Vamos -susurro Ben.
Me llevo hasta el salón principal. Era enorme, se veía mas grande que la ultima vez que estuve ahí, las dos únicas veces que estuve en ese salón se encontraba abarrotado de personas, ahora se podía apreciar la manera antigua en la que estaba decorado, había un piano pegado a una de las paredes, me acerque a el y lo toque, nunca antes lo había visto.
- ¿Tocas? -le pregunte al chico que se acercaba a mi.
- Mis padres insisten, pero la que en realidad toca es mi hermana -dijo sonriendo.
- ¿Hermana? -enarque una ceja, pues nunca me había hablado de ella.
- Mady -sonrió-, ya no vive con nosotros.
- ¿En donde esta ella? -pregunte curiosa.
- Texas.
- Valla -sonreí. Era increíble como podía sonreír con tanta facilidad cuando estaba el.
- Pero entonces, ¿tocas? -volví a preguntar.
El rió.
- Si -dijo asintiendo.
- No te creo -desafié.
- ¿No? -pareció ofendido- pues déjame demostrarte lo equivocada que estas.
El se sentó frente al piano abriendo la tapa que cubría las teclas. Me miro y coloco la mano en el espacio libre del asiento invitándome a acompañarlo, lo hice.
- ¿Que quieres escuchar? -sonrió.
- ¿Lo que yo quiera? -dudo-, mejor escoje tu -reí.
El miro por un minuto las teclas que tenia en frente y coloco sus dedos sobre algunas de ellas, comenzó a tocar una melodía que yo no conocía pero era preciosa, sonreí inconscientemente escuchando aquella tonada.
- May I -sonrió una vez que había terminado-, de Trading Yesterday.
- No la conocía , es...
- Especial -sonrió mirándome.
- ¿Porque es especial?
- Me recuerda a ti -dijo mirando el piano.
- Y... ¿de que habla la canción?
- Escuchala tu misma -dijo sonrojado.
Baje la mirada sin saber que decir, no era incomodo, pero me hacia sentir un tanto mal ya que creía a que se refería.
- Joven, la cena estará en cinco minutos -Elvia apareció salvando el momento.
- Gracias Elvia -contesto Ben sonriendo-, ¿vamos? -pregunto el.
- Si, solo... debo pasar al baño.
- En ese pasillo a la derecha, la primera puerta -sonrió-, te espero en el comedor.
- Gracias -dije caminando.
Llegue al pequeño cuarto sin dificultad, en realidad había sido un pretexto para estar sola un momento, suspire recargada en la puerta, no tenia una idea de que era a lo que quería llegar Ben, ¿en verdad quería amistad o estaba intentando algo más?
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