Maratón 8/20 - Estoy en Problemas 70

Las clases y el descanso pasaron demasiado rápido, supongo que a todos les entusiasmaba la llegada de las vacaciones, ¿y a quien no? por fin se acabarían las tareas y trabajos. A olvidarnos del colegio por un buen tiempo.
El timbre sonó anunciando el final del día, sonreí conforme, pues a partir de ese momento seria libre.
Me levante y salí del aula con Greys a mi lado.
- Es tan genial que ya hayan acabado las clases -sonrío-. ¡Estos últimos días fueron una pesadilla!  Hagan este reporte, luego este ensayo, un resumen... ya era hora de terminar.
- Cierto -reí.
- Quejándote del colegio? -Logan apareció abrazándonos  ambas.
- Si... digo que ya era hora de que terminara el colegio -dijo ella.
- Concuerdo contigo -sonrió Logan-. Ahora ya tendré mas tiempo libre para ti -dijo besándome la mejilla.
- Eso me gusta -sonreí. 
Logan soltó a Greys y tomo mi mochila, ahora el la cargaba.
- ¿Y para mi? -protesto ella.
- Greys... no es necesario decirlo, sabes que también tengo tiempo para ti -rió el.
- De acuerdo, de acuerdo. Ustedes dicen cuando salimos y yo veré cuando puedo.
- También estarás con Liam.
- Aprovechare antes de irme.
- ¿Cuando te vas? -pregunto Logan.
- El veinte -respondió ella-, regreso el veintisiete... pero es mucho tiempo -volvió a quejarse.
- Una semana -respondimos Logan y yo al unisono.
- Aja, como ustedes se la pasaran juntos no sienten lo que yo -hizo un puchero de niña pequeña.
- Greys... -la animo Logan al momento que tomaba mi mano- aun falta un poco mas de una semana, aprovecha a Liam.
- Tienes razón -concordó ella-, es mas... comenzare ahora -dijo sonriendo.
Acto seguido echo a correr hacia la plaza.
- Espero que tu hermano no se enfade -rió Logan.
- El es igual que ella -reí con el.
Seguimos caminando, llegamos a ese parque en donde nos besamos por primera vez, nos sentamos en esa banca en donde ya habíamos estado tantas veces.
- ¿Que plenas para estas vacaciones? -pregunto el dejando nuestras mochilas en un lado de la banca.
- Estar contigo -dije al momento que el me abrazaba.
- Valla... tenemos los mismos planes -dijo sonriéndome.
- ¿De verdad? -lo mire.
- Aja -dijo besándome la mejilla-, quiero estar contigo todo el tiempo que pueda.
Sus besos continuaron de mi mejilla hasta que llego a mis labios, los entre abrí para darle paso a un caluroso beso, uno que me lleno de mil emociones, como esa primera vez.
Quizá treinta segundos duro ese colapso de sentimientos.
Suspire y lo mire.
- No entiendo -susurre.
- ¿Que no entiendes?
- Como puedes hacer todos los momentos especiales, como puede ser todo tan perfecto cuando estoy contigo.
- Te equivocas -aseguro.
- ¿Porque?
- La perfección la haces tu -dijo para después volver a llenarme de esos sentimientos.
La tarde comenzó a caer, el sol avanzaba lentamente hacia el horizonte huyendo de la luna, prontamente quedaríamos iluminados solo por la luz de la luna.
Mi celular interrumpió nuestra animada platica.
Mire la pantalla para descubrir quien llamaba... Liam.
Me había olvidado de avisar... y es que ya estaba acostumbrada a estar sola en casa que por momentos olvidaba que tenia una nueva familia.
- ¿Liam? -dije al momento que conteste la llamada.
- ¿Quien mas Amy? ¿donde estas? -sonaba molesto.
- En un parque, con Logan...
- Dígnate a avisar, ¿sabes lo histérica que puede ponerse mi madre?
- Al menos ya se a quien le sacaste -bromee.
- No es gracioso Amy.
- Ya lo siento... no tardo en llegar.
- Mas te vale -dijo al momento que cortaba la llamada.
- Creo que tengo problemas -dije guardando el celular.
- Sera mejor que nos vallamos.
- Si -asegure.
Tomo nuestras mochilas colocándoselas en los hombros, hice un intento fallido por llevarme la mía, el solo tomo mi mano y caminamos hacia mi casa.
Llegamos después de unos minutos.
- ¿Que harás mañana? -pregunto una vez que estuvimos frente a la puerta.
- Creo que quedarme en casa -sonreí.
- Entonces vendré a verte -dijo tomándome por la cintura.
- Entonces te espero mañana -dije rodeando su cuello con mis brazos.
- A las cinco -susurro cerca de mis labios.
- Hecho -fue lo ultimo que pude decir, sus labios me callaron haciéndome entrar en un trance que solo sus labios podían lograr.
- Hasta mañana -dijo una vez que terminamos nuestro beso.
- Hasta mañana -sonreí.
El me regreso mi mochila y entre a la casa, cuando pase por la sala escuche a Liam llamándome.
- Sin duda estoy en problemas -susurre.